Biblioteca Nicanor Parra

Arquitecto:
MATHIAS KLOTZ

Colaboradores:
Francisco Reyes
Pedro Pedraza
Eduardo Ruiz Risueño
Diego Labbé
María José Celis

34°35’02.39″S
58°24’14.12″O
Santiago
Chile

Superficie construida: 15000 m2
Superficie terreno: 5000 m2

La Universidad Diego Portales es una fundación privada sin fines de lucro que nace hace 27 años junto con la aparición de universidades privadas en Chile. En esa época decide ubicarse en el sector céntrico de la ciudad en una zona llamada Santiago Sur Poniente. Lo hizo porque estaba en la intersección de las dos líneas de metro más importantes, y debido a que producto del deterioro de la zona, era fácil encontrar grandes casonas a muy buen precio que satisficieran los requerimientos iniciales.

En el año 2003, con 12.000 alumnos y veinte años de historia, la UDP tuvo el requerimiento de aumentar la superficie de su infraestructura en 60.000 metros. 

Para esto se me contrató como asesor, para coordinar  toda la operación, a la vez que proyectista de  tres de las nueve obras que contemplaba el plan, que corresponden  al  Edificio de Uso Múltiple,  la Facultad de Medicina, y la Facultad de Economía y Empresa. Lo más complejo de este crecimiento, es que debía realizarse en un plazo de dos años, en terrenos que ya estaban edificados, los que tenían en algunos casos edificios de interés histórico y en otros instalaciones reciclables o definitivamente demolibles. Se hizo un plan que contempló la contratación de docentes menores de 40 años de la Facultad de Arquitectura, los que desarrollaron obras bajo criterios colectivos predeterminados, en el afán de que la suma de las partes, diera a nuestra Universidad una identidad ligada a una arquitectura responsable, consciente de su entorno, toda vez que contemporánea y sustentable (Actualmente la campaña de admisión de la Universidad está centrada en su locación y su arquitectura).

La operación fue de tal magnitud, que constituyó el mayor esfuerzo privado en la recuperación de un casco histórico, en la ciudad de Santiago, y fue realizada en su totalidad aplicando una normativa edificatoria aún no puesta en práctica a esa fecha,  que apuntaba a preservar los edificios de interés histórico de la zona, así como velar por la defensa del patrimonio medioambiental que posee la escala del barrio que en general no supera los siete pisos. Actualmente el barrio es denominado como el BUS (barrio universitario de Santiago)

En una segunda etapa se me ha encomendado la construcción de la Biblioteca Central de la Universidad, cuya edificación comienza en enero 2010. 

Se trata de un edificio que se complementa con el ya construido Edificio de Uso Múltiple, y que básicamente consiste en dar continuidad al tránsito peatonal por el interior de la manzana, estableciendo de este modo una suerte de segunda trama de circulación, paralela a la de las calles, colapsada por el movimiento de 100.000 estudiantes que se desplazan diariamente por el barrio.

Por tratarse de una zona de alta densidad, tanto este edificio como su predecesor  hacen un gran esfuerzo por llevar luz natural y aire fresco a la totalidad de sus instalaciones habitables, por medio de sistemas pasivos y materiales claros que reflejen y conduzcan la luz. Las cubiertas son utilizadas como zonas habitables, instalando en ellas programas públicos, jardines y zonas de relajación.

 El Edificio de Uso Múltiple, que da hacia la calle Ejército, se ha construido en el patio trasero de una casa de los 40, manteniéndola y restaurándola, de modo de preservar la escala de la calle, mientras que la nueva Biblioteca, sobre la calle Vergara, utiliza un terreno baldío, donde existió una construcción liviana sin valor patrimonial El nuevo edificio aparece con un volumen verde, cuya vegetación sirve de filtro solar a la orientación oeste, y representa simbólicamente  la actitud responsable de la institución, que con este edificio postula por vez primera a una certificación LEED GOLD, convirtiéndose en el primero y  único edificio universitario en Chile proyectado bajo estos parámetros. 

Interiormente las fachadas asoleadas se protegen también con vegetación, y la cubierta está tratada) con una pradera natural, en memoria de lo que fue el valle de Santiago, antes del arribo de los conquistadores.  (Visitar en youtube biblioteca UDP o Mathias Klotz)